La primavera nos ha sorprendido y surge LA PREGUNTA: a ver qué diantres me pongo ahora.
No sufras. Gracias a Dior, lees con asiduidad No Sin Mi Visa y eso va a resolverte la papeleta cuando eches una ojeada a tu guardarropa y de repente «…en el ángulo oscuro, de su dueña tal vez olvidada, silenciosa y cubierta de polvo, veíase …¡la falda midi!»
(*N. del A.) Quede constancia de mis disculpas a D. Gustavo Adollfo, donde quiera que se encuentre en estos momentos, por masacrar sus versos.
Con esta meteorología locuela que nos lo pone, difícil no, chunguísimo, a la hora de escoger atuendo por las mañanas entre bostezo y bostezo con la taza de café en la mano, la falda midi o midi skirt, apaña y mucho.
Únicamente hay que conocer algunas tretas y argucias para sacarse partido y nos favorezca buscando evitar el indeseado efecto lagarterana.
¿Tienes las piernas tan largas como una supermodelo? ¡Enhorabuena! Puedes ponerte la midi con zapato plano. Para resto de las mortales el tacón es estrictamente obligatorio.
Considerando que has tapado con recato tus piernas, atrévete a mostrar piel de alguna otra parte: enseña los hombros, luce un crop-top o lánzate con el escote en V de la espalda.
Un buen truco para «alargar» ópticamente las piernas y verte más favorecida es llevar zapatos tipo salón o calzado sin tiras en los tobillos.
La falda midi «ocupa» mucho espacio visual en tu outfit. Juega con texturas, formas y tejidos poniendo atención a no sobrecargarte como un baldaquino barroco.
El lugar perfecto para ponerte la falda midi es la altura natural de tu cintura, o un poco más arriba. Más abajo puede crear un efecto de torso anormalmente alargado y piernas cortas.
Otro truco es meter el top o la camisa por dentro, con el objeto de crear una línea visual alargada por debajo de tu cintura. Añadir un cinturón resaltará la feminidad de tu silueta.
Elige la tuya y anímate a probar múltiples estilos, incluso con la misma prenda. Por ejemplo, el estampado tartán aporta un toque muy bueno que puede ir desde el preppy al grunge.
Sácate partido al máximo pero sobre todo ¡diviértete experimentando! y si quieres romper esquemas y no seguir ninguno de estos consejos, me alegrará mucho que lo hagas.
Si es que a fin de cuentas ¿qué importa lo que digan estilistas, fashion insiders de la vida o blogueras trileras y dicharacheras? No hay nada que vista más y mejor que tu propia actitud.